La Liga Católica Alemana fue una coalición de Estados alemanes católicos formada el 10 de julio de 1609 bajo el liderazgo del Duque Maximiliano I de Baviera como respuesta a la formación de la Unión Protestante un año antes. El Palatinado renano fue entregado a nobles católicos, mientras que el título de Elector Palatino se le dio a su primo lejano, el duque Maximiliano I. Federico V, aunque ya sin territorios, se convirtió en un exiliado prominente en el extranjero, granjeándose simpatías y apoyo a su causa en las Provincias Unidas, Dinamarca y Suecia. Los ganadores avanzan de etapa mientras que los perdedores dejan de participar. Bajo el mando del general Tilly, el ejército de la Liga Católica (que incluía al filósofo René Descartes en sus filas) pacificó la Austria Alta, mientras que las fuerzas del emperador pacificaban la Austria meridional. El 10 de febrero de 1610, los representantes de todos los Estados católicos importantes, a excepción de Austria y Salzburgo, se reunieron en Wurzburgo para decidir la organización, financiación y armamento de la Liga. No obstante, las diferencias entre sus miembros y Austria pusieron en riesgo la propia existencia de la Liga.
En abril de 1610, aún no habían sido pagadas las contribuciones de todos sus miembros y Maximiliano amenazó con renunciar. Después del fin de la guerra en Bohemia, el ejército de la Liga luchó en el centro de Alemania, pero fue derrotado en la batalla de Mingolsheim el 27 de abril de 1622. Debido a esto se unieron a las tropas españolas y vencieron en Wimpfen el 6 de mayo, capturando posteriormente la ciudad de Heidelberg después de once semanas de asedio. Tenemos, pues, sin que haya lugar a dudas, que databa del 17 de abril de 1815 la independencia cordobesa. La primera gran acción militar de la Liga tuvo lugar el 8 de noviembre de 1620 en las cercanías de Praga, en la que se llamó la batalla de la Montaña Blanca. El primer partido tuvo lugar en Dayton (estado de Ohio), el día 3 de octubre de 1920 con el equipo local, los Dayton Triangles venciendo a los Columbus Panhandles por 14-0. La liga cambió después su nombre por el actual, la National Football League, dos años después, marsella camiseta para convertirse en la liga profesional de más influencia en el fútbol americano y ser considerada la liga deportiva más lucrativa del mundo.
La Primera División consta de un grupo único integrado por dieciocho equipos, pertenecientes a clubes de fútbol o sociedades anónimas deportivas (SAD). En la primera parte volvió a tener dificultades para crear ocasiones de gol y presionar rápido tras las pérdidas de balón, pero en la segunda mitad Mbappé se estrenó en Liga tras una asistencia formidable de Fede Valverde de tacón. Ambos equipos tienen derecho a pedir la revisión de una jugada o la rectificación de alguna marcación arbitral hasta dos veces por cada mitad del juego. Sin embargo, las tensiones religiosas se hicieron más intensas durante la segunda mitad del siglo XVI, y los obispos se negaban a abandonar sus obispados. Bohemia permanecería en manos de los Habsburgo durante casi 300 años. Una vez unidos los dos ejércitos, se desplazaron hacia el norte, dentro de Bohemia. La batalla marcó el fin del período bohemio de la guerra de los Treinta Años al entrar las tropas imperiales en la capital de Bohemia y someter a los protestantes. Ante el inminente estallido de la guerra de los Treinta Años, el emperador, en busca de ayuda, trató de restaurar la Liga. En la elección de sede para el mundial de 1962 participó Argentina y Chile, luego de un denso congreso en 1956 para elegir el epicentro mundialista el director de la albiceleste terminó su discurso con la frase “Podemos hacer el mundial mañana mismo, lo tenemos todo”, ante esta jugada el representante Chileno Carlos Dittborn realizó una fantástica presentación la cual terminó con la frase “ Porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo”.
En partido entre La Equidad y Junior de Barranquilla, una especial jugada en los minutos finales viene causando tanta polémica que algunos analistas arbitrales ya dieron sus consideraciones. Para evitar que lo hiciera, España y el Papado prometieron una contribución adicional. En una reunión de varios de los príncipes eclesiásticos a finales de 1618 se decidió reconstruir la Liga en su base original. Para crear una unión de Estados católicos, como contrapartida de esta Unión protestante, Maximiliano I de Baviera inició negociaciones con otros príncipes católicos. Los príncipes alemanes (alrededor de 360 de ellos), podían elegir la religión (luteranismo o catolicismo) en sus señoríos de acuerdo con su conciencia. Por otra parte, las potencias católicas intentaban restaurar el catolicismo en el país. La rebelión literalmente se hundió, y las amplias confiscaciones patrimoniales y supresiones de títulos nobiliarios bohemios preexistentes aseguraron que el país regresaría a la fe católica después de más de dos siglos de disidencias religiosas. Lamenta que podrían haberse llevado los tres puntos, sobre todo al haber fallado tres penaltis. Y lo que más luce en el duque, «erga milites beneuolentia», que ha sido causa que pudiese haber dado en tan breve tiempo tantos socorros y alcanzado tan grandes y tan difíciles empresas; y para cerrar la boca a toda calumnia, aquella notable palabra: «nec vlla, nisi ex permisso voluptas».
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